Neuropsicología
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La neuropsicología es una disciplina dentro de las neurociencias que estudia la relación entre el cerebro y la conducta. Es decir, las relaciones que se establecen entre procesos cognitivos, el comportamiento y el entorno.
Hoy en día se vale de métodos experimentales, de la observación clínica, y se puede apoyar de los estudios de neuroimagen y de las ciencias cognitivas para diseñar esquemas de funcionamiento y de rehabilitación de las funciones dañadas o perdidas, basados en las funciones preservadas.
Es una herramienta de fundamental importancia para rehabilitar pacientes con afectaciones neuropsicológicas (daño cerebral adquirido, enfermedades neurodegenerativas o trastornos del neurodesarrollo, entre otros). La neuropsicología en neurorrehabilitación siempre intenta minimizar los déficits que pueda sufrir el paciente y mejorar su calidad de vida.
Todo ello manteniendo siempre presente que el objetivo es que el paciente pueda emprender acciones para manejarse con la mayor independencia posible en su entorno habitual.



FUNCIONES QUE SE PUEDEN VER ALTERADAS
Procesos cognitivos
La consciencia de nosotros mismos y de nuestro contexto, esto es, donde y cuando. ¿Conoces tus datos personales?, ¿sabes el día que es hoy?, ¿dónde estás?
La capacidad de seleccionar y concentrarse en un estímulo o tarea, al igual que secuenciar diferentes actividades. ¿Eres capaz de mantener la atención en una tarea? ¿tardas más tiempo? ¿te cansas? ¿puedes hacer dos cosas a la vez?
La capacidad para retener, almacenar y recuperar información. ¿Recuerdas los hechos relevantes de tu vida? ¿recuerdas lo que hiciste ayer? ¿los recados que te dan? ¿Soy incapaz de recordar una lista de la compra?
Reconocimiento perceptualmente el objeto a pesar del cambio de tamaño, forma luminosidad. ¿Reconoces objetos, fotos…? ¿utilizas correctamente diferentes utensilios? ¿omites alguna parte de su campo visual?
La capacidad comprender y expresar un mensaje además de la capacidad lectora y escrita. ¿Comprendes lo que se te dice? ¿encuentras dificultades para comunicarte? ¿Se te quedan las palabras en la punta de la lengua? ¿lees, escribes?
Secuencia de actos con una intencionalidad. Imagina que te tiene que vestir para ello tienes seleccionar la ropa y después saber cómo ponértela. Imagina que tienes un objeto, ¿cómo lo utilizarías?
Reconocimiento perceptualmente el objeto a pesar del cambio de tamaño, forma luminosidad. ¿Reconoces objetos, fotos…? ¿utilizas correctamente diferentes utensilios? ¿omites alguna parte de su campo visual?
Capacidad para vivir en comunidad y ser capaz de interaccionar empleando normas sociales con habilidad. ¿Soy capaz de intuir que está pensado la persona que tengo delante después de haberle hecho algo malo? ¿tengo muchos problemas mi entorno?
Adaptamos los objetivos a cada momento del proceso

Ven a conocernos y resuelve tus dudas sobre nuestro trabajo
Un abordaje general
Siempre partimos de una exhaustiva evaluación
El neuropsicólogo ejerce su actividad profesional a través de la evaluación (cognitiva, conductual y emocional), realizando un perfil de funciones alteradas y preservadas y diseñando programas de rehabilitación orientados a mejorar la calidad de vida. Sea cual sea, la fase de recuperación en la que esté el paciente (aguda, subaguda o crónica).
La conducta y emoción también forman parte de sus competencias: irritabilidad, impulsividad, agresividad, egocentrismo, infantilismo, desinhibición, rigidez de conducta, oposicionismo, apatía, depresión, euforia…
El entorno: el medio familiar, laboral, cultural y socioeconómico en el que se desenvuelve una persona.

Objetivos
Diferentes orientaciones con un único fin
En el ámbito de la rehabilitación neuropsicológica es posible distinguir diferentes orientaciones y objetivos:
La restauración de la función dañada: tener como objetivo restaurar los procesos cognitivos deteriorados a través de la estimulación. Las técnicas se basan en la realización de un conjunto de tareas y ejercicios repetitivamente para conseguir la activación de los circuitos cerebrales y la recuperación de las funciones cognitivas afectadas.
La compensación de la función perdida: tiene como objetivo hacer posible la realización de actividades con un objetivo funcional, mediante estrategias alternativas o ayudas externas que reduzcan o eliminen la necesidad de requisitos cognitivos.
La optimización de las funciones residuales: Mejorar el rendimiento de la función alterada a través de la utilización de los sistemas cognitivos conservados.

La persona como centro de un trabajo integrador y funcional
Método de trabajo
Extraemos lo mejor de cada método sin casarnos con ninguno
La población a la que va dirigida varia tanto en edad como en los diferentes tipos de diagnósticos y las alteraciones que derivan. Las causas que dañan el sistema nervioso y las repercusiones que originan en el comportamiento son cruciales.
Por un lado, en adultos las causas más frecuentes de afectación del sistema nervioso son el daño cerebral adquirido (DCA), la epilepsia y los procesos neurodegenerativos.
Por otro lado, en la infancia daño cerebral adquirido infantil, epilepsia, distrofias musculares, discapacidad intelectual, altas capacidades, habilidades sociales y trastornos del neurodesarrollo.

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